lunes, 23 de abril de 2012

UNIDAD 8: PRODUCCIÓN DEL MOVIMIENTO


1. Aparato locomotor.

1.1. Huesos, articulaciones y músculos: estructura y clasificación.

HUESOS

El  tejido que forma la parte fundamental de los huesos es el denominado tejido óseo. Este tejido es un tipo de tejido conectivo. Se caracteriza por estar formado por células rodeadas de una sustancia denominada matriz ósea, donde abunda gran cantidad de fibras proteicas,  sales minerales, principalmente de fosfato y carbonato cálcico y células óseas.

Tipos de huesos

Los huesos se pueden clasificar atendiendo a su forma en:

a. Huesos largos: son más largos que anchos. Actúan como palancas en el movimiento.
b. Huesos cortos: son más o menos cúbicos. Ocupan lugares pequeños y su función es transmitir la fuerza.
c. Huesos planos: actúan como protectores de órganos o para la inserción muscular.
Tipos de huesos según su forma

Partes de un hueso

Los huesos pueden ser de distintos tamaños y formas, pero en todos podemos distinguir algunas de las siguientes partes:

Epífisis: son las zonas ensanchadas y terminales de un hueso largo.
Diáfisis: es la zona alargada del hueso. También se le denomina caña.
Metáfisis: zona de transición entre la epífisis y la diáfisis. En épocas de crecimiento esta zona se encuentra separada de la epífisis por el cartílago de crecimiento.
Apófisis: salientes del hueso donde se insertan músculos, tendones y ligamentos.
Agujeros: o conductos óseos, son zonas donde entran o salen arterias y venas con la función de nutrir al hueso.
Cavidades: lugares donde se alojan las apófisis, los tendones, las arterias, los músculos o los órganos.
Algunas partes de los huesos (no se representan apófisis, agujeros ni cavidades)

Tipos de tejido óseo

En el hueso se pueden distinguir, al microscopio óptico, dos tipos de tejidos óseos: Tejido óseo compacto y Tejido óseo esponjoso.

1) Tejido óseo compacto. Se encuentra en la capa externa de los huesos largos formando la diáfisis, en el exterior y en el interior de los huesos planos y en distintas zonas en los huesos cortos, según cada hueso en concreto. Es un tejido duro, denso y frágil. Al observarlo al microscopio destacan estructuras cilíndricas, denominadas osteonas, formadas por capas concéntricas de laminillas óseas, donde se encuentran insertos los osteocitos. En el interior de la osteona hay un canal, el conducto de Havers, por donde circulan vasos sanguíneos, linfáticos y nervios. Los vasos sanguíneos aportan los nutrientes necesarios a las células de los huesos y conducen las hormonas que controlan el aporte de calcio. También aparecen canales que conectan unos conductos de Havers con otros. Estos conductos se llaman conductos de Volkmann.
Partes del tejido óseo (los círculos negros representados en las osteonas son osteocitos)

2) Tejido óseo esponjoso. Se encuentra en la zona interna de huesos largos y planos. Forma la epífisis en los huesos largos. En los huesos cortos forman el interior y zonas del exterior.

ARTICULACIONES

La articulación es una estructura que pone en contacto dos o más hueso mediante un tejido, más o menos blando, que permite al esqueleto rígido adoptar distintas posturas.

Partes de una articulación

Aunque existen varios tipos de articulaciones todas tienen los siguientes elementos:

A. Superficie articular: zona de contacto entre los huesos.
B. Cartílago articular: tejido que recubre la superficie articular.
C. Ligamentos articulares. Conjunto de fibras que unen un hueso con otro, reforzando la articulación.

Tipos de articulaciones

Dependiendo de la movilidad que presenten los huesos gracias a la articulación, se distinguen tres tipos:

A. Articulaciones inmóviles, fijas o sinartrosis. Se encuentran generalmente entre huesos planos, produciéndose una unión estable que no permite el movimiento. Los huesos se unen directamente entre sí mediante bordes con entrantes y salientes (dentados), formando una sutura. Por ejemplo, encontramos este tipo de articulación en los huesos que conforman el cráneo.
Articulaciones tipo sinartrosis del cráneo. La flecha señala una sutura

B. Articulaciones semimóviles o anfiartrosis. Son aquellas que permiten cierta movilidad. Los huesos de la articulación no entran en contacto; entre ellos se localiza una estructura denominada fibrocartílago de unión. Todo ello tiene como elementos de sujeción a los ligamentos, que están formados  por un tejido conjuntivo fibroso. Un ejemplo claro lo encontramos en la columna vertebral. Las vértebras se encuentran separadas por discos intervertebrales que confieren cierta movilidad, y todo el conjunto de vértebras, discos y ligamentos permiten los movimientos de flexión, giro o extensión de la columna.
Dos ejemplos de articulación tipo anfiartrosis: la columna vertebral y el pubis

C. Articulaciones móviles o diartrosis. Articulaciones que permiten gran variedad de movimientos debido a su complejidad. Los huesos de la articulación no entran en contacto, ya que los extremos del hueso están recubiertos de un tejido cartilaginoso denominado lámina cartilaginosa. Esta zona está lubricada por el líquido sinovial que se encuentra encerrado en la bolsa sinovial. Algunas diartrosis están constituidas además por almohadillas cartilaginosas, denominadas meniscos. Éstas sirven de amortiguadores y adaptan los huesos de la articulación. Todo el conjunto está reforzado por bandas de tejido fibroso, que son los ligamentos. Se pueden distinguir diferentes subtipos de articulaciones móviles, atendiendo al movimiento que permiten realizar:

1. Deslizamiento (artrodias): se producen en las articulaciones de la muñeca y el tobillo y pie.

2. Flexión en un plano (trocleares): se encuentran en el codo y la rodilla.

3. Rotación (enartrosis): se encuentran en el hombro y la cadera.


TEJIDO MUSCULAR

El tejido que proporciona la propiedad de contracción es el tejido muscular estriado esquelético, formado por fibras: asociación de varias células, que forman estructuras largas con varios núcleos. La principal propiedad de este tipo de tejido es que se contrae de forma rápida y voluntaria, debido a que lo controla el Sistema Nervioso Central.

El sarcómero

Bajo el microscopio óptico, este tejido aparece estriado (por eso se conoce como tejido muscular estriado esquelético), donde se ven bandas claras y bandas oscuras de forma alterna. Las bandas claras se denominan bandas I y las oscuras, bandas A, y constituyen el sarcómero, que tiene capacidad contráctil debido a que está formado por las proteínas actina (forma la banda I) y miosina (que junto con algunos fragmentos de actina que se introducen entre las miosinas forma la banda A). Existe una zona de la banda A donde no hay actinas y se observa más clara. A esta banda se la denomina banda H.
Cuando se produce la contracción, el tamaño de la Banda I y de la Banda H disminuye, puesto que las actinas se acercan al centro de la Banda A, gastando energía química (ATP). Así, se acortan los sarcómeros y se acorta el músculo entero, produciendo el movimiento.

Los músculos

El músculo esquelético está formado por fibras musculares que a su vez se rodean de una capa de tejido conjuntivo, denominada endomisio. Las fibras se reúnen en fascículos primarios, que también están rodeados por otra capa de tejido conjuntivo, esta vez, más grueso, denominada perimisio. Los fascículos primarios se agrupan en fascículos secundarios, protegidos por el epimisio, que es la capa más gruesa de tejido conjuntivo. El epimisio se prolonga formando los tendones y las aponeurosis. Los tendones y las aponeurosis están formados por tejido conjuntivo fibroso. La función de éstos es unir el músculo al hueso. Las arterias, venas y vasos linfáticos que llegan al músculo deben atravesar las capas de tejido conjuntivo. Llevan el alimento y oxígeno, necesarios para el funcionamiento muscular. Los nervios responsables de la actividad muscular se unen a esta estructura mediante las placas motoras, que son las zonas donde se producen las sinapsis.

Tipos de músculos

Los músculos, al igual que los huesos, los podemos clasificar atendiendo a distintas características, como la forma, el tamaño, el color, la función, la orientación de las fibras o la posición relativa en el cuerpo. La característica más utilizada para clasificarlos es, atendiendo a la forma.  Por ello, podemos clasificarlos en fusiformes, orbiculares y planos.

Funciones de los Músculos Esqueléticos

Básicamente, los músculos esqueléticos de nuestro organismo tienen tres funciones: movilidad, capacidad energética y mantenimiento de la postura.

Movimientos. Las contracciones de los músculos esqueléticos producen movimientos del cuerpo como una unidad global (locomoción), así como de sus partes.

Producción de calor. La actividad muscular constituye una de las partes más importantes del mecanismo para conservar la homeostasia de la temperatura.

Postura. La contracción parcial continua de diversos músculos esqueléticos hace posible levantarse, sentarse y adoptar otras posiciones sostenidas del cuerpo.


1.2. Funciones de huesos, articulaciones y músculos en la producción de movimiento.

Función de los huesos

Como ya sabes, los huesos no son capaces de contraerse pero actúan como palancas en el movimiento. El movimiento de la palanca lo generan los músculos. Resumiendo, los huesos proporcionan la base mecánica para el movimiento, ya que son el lugar de inserción para los músculos y sirven como palancas para producir el movimiento.
Toda palanca necesita un punto de apoyo, A, sobre el que actúan dos fuerzas opuestas, la potencia y la resistencia. La potencia, P, es la fuerza que provoca el desplazamiento. La resistencia, R, es la fuerza que se opone al movimiento.
Existen tres tipos de palancas:

1) Palancas de primer género. Este tipo permite gran variedad de acciones, movilidad y potencia. Un ejemplo es el cuello.
Palanca de primer género

2) Palancas de segundo género. En este caso no se producen grandes desplazamientos pero permite vencer grandes resistencias, como es el caso del pie.
Palanca de segundo género

3) Palancas de tercer género. Permite grandes desplazamientos pero no puede vencer grandes resistencias, como es el caso del brazo
Palanca de tercer género
Resumen de los tres tipos de palancas

Función de las articulaciones

Las articulaciones relacionan dos ó más huesos entre sí mediante una  zona de contacto y permiten el movimiento de esos huesos en relación unos con otros. Como ya sabes, existen tres tipos de articulaciones. El tipo sinartrosis no permite el movimiento, pero sí los tipos anfiartrosis y diartrosis. A su vez, el tipo diartrosis permite el movimiento en un plano en las tres direcciones del espacio.

Función de los músculos

Los músculos producen el movimiento, tanto de unas partes del cuerpo con respecto a otras, como del cuerpo en su totalidad, como sucede cuando trasladan el cuerpo de un lugar a otro, que es lo que se llama locomoción.
Los músculos esqueléticos también se pueden clasificar según su función. Bajo esta agrupación, tenemos músculos que son agonistas, antagonistas, estabilizadores y neutralizadores.

1) Agonistas o Motores. Son los músculos que producen el movimiento articular, es decir, mueven un segmento corporal específico, como por ejemplo el tríceps braquial, que es un agonista en el proceso de extensión del codo.

2) Músculos Fijadores, Estabilizadores o Sostenedores. Son los músculos que actúan fijando las articulaciones para facilitar el movimiento principal. Como ejemplo se puede citar la acción de abrir una puerta, es decir, el brazo tiene que levantarse (aducción) y vencer la resistencia de la tracción del pomo. Para ello el húmero necesita que su extremo superior sea estabilizado por la escápula, a través de músculos como el redondo mayor, el trapecio y/o el romboides. Una vez estabilizada la escápula, entrarían en acción los músculos que permiten la flexión del codo para abrir la puerta.

3) Músculos Neutralizadores. Son los músculos que se contraen para contrarrestar o neutralizar una acción no deseable de uno de los músculos motores que se contraen. En otras palabras, si levantamos un brazo, este tipo de músculos evita que se contraigan músculos del hombro y lo levantemos también.

4) Músculos Antagonistas. La contracción de este tipo de músculos produce una acción opuesta a la de un músculo motor o agonista. Pondremos de ejemplo nuevamente el brazo: al flexionar el codo, el agonista es el bíceps braquial, puesto es el que se contrae y ejerce el movimiento. Por el otro lado, el antagonista es el tríceps braquial, ya que es el que se relaja (acción opuesta al agonista). Por el contrario, si extendemos el codo, ahora el agonista es tríceps braquial porque se contrae y efectúa el movimiento articular de extender el codo, por tanto el antagonista es ahora el bíceps braquial debido a que es el que se relaja en dicho movimiento (acción opuesta al tríceps).
       
1.3. El músculo como órgano efector del movimiento. Fisiología de la contracción muscular.

Como podrás imaginar, durante la contracción muscular se gasta energía en forma de ATP para producir movimiento. Sin embargo, durante la relajación se gasta mucho menos. Es decir, el consumo del sistema muscular es extraordinariamente variable, porque aunque es el mayor consumidor durante el ejercicio, este consumo disminuye mucho en reposo.
Por otra parte, las fibras musculares funcionan a todo o nada, se contraen o se relajan, pero no se quedan a medio camino. Como vimos en unidades anteriores, la cantidad de ATP celular es muy escasa y su función energética es limitada, por lo que se recurre a otras fuentes de energía:

1) Fosfocreatina, que se transforma en ATP en caso de demanda.

2) Metabolismo anaeróbico. A través de la glucolisis anaeróbica se parte del glucógeno para pasarlo a glucosa, a piruvato y por último a lactato. Ya sabes que esta vía metabólica produce ATP de manera rápida pero se agota rápidamente. El lactato se consume en el músculo cardiaco, riñón o hígado. A su vez, el hígado puede volver a convertirlo en glucosa. Esta vía permite unos 30 segundos de ejercicio intenso. Luego hay que recuperar el glucógeno, proceso que tarda de horas a días.

3) Metabolismo aerobio. En esta ruta metabólica se consume el piruvato de la glucosa, los ácidos grasos o los aminoácidos en las mitocondrias. Da mucha más energía que el caso anterior pero también es un proceso más lento. Además, es necesario aporte de oxígeno a través de capilares sanguíneos o en forma de depósitos de mioglobina, presente en la fibra muscular. En ejercicios prolongados casi todo el aporte es aeróbico. Tras el ejercicio,  se necesita recuperar el ácido láctico y convertirlo en pirúvico, restablecer los depósitos de glucógeno, restablecer los niveles de fosfocreatina, recuperar oxígeno para sintetizar mioglobina y recuperarse del gasto cardiaco y respiratorio.

Contracción muscular a nivel microscópico

Durante la contracción muscular, los músculos desarrollan tensión y se acortan o estiran (o bien pueden permanecer de la misma longitud). Pare ello es necesario un estímulo nervioso previo. La contracción muscular se puede explicar como un desplazamiento de los miofilamentos, es decir la cabeza de la miosina se ancla a la actina produciéndose así el dicho desplazamiento. A su vez, esta contracción muscular está regulada por calcio,  ATP y Magnesio, aunque se desconoce por qué el Magnesio causa contracción en músculos post mortem (esto está bajo investigación).
Durante el estado de contracción, la actina se superpone casi al completo sobre los filamentos de miosina, debido a fuerzas de atracción resultantes de fuerzas mecánicas, químicas y electrostáticas generadas por la interacción de los puentes cruzados de los filamentos de actina. En estado de relajación o reposo, las fibras de miosina y actina, las proteínas en los filamentos de la zona A, apenas se superponen entre sí y las fuerzas de atracción entre los filamentos de actina y miosina están inhibidas.
En todo este proceso también se necesita energía para mantener la contracción muscular, que proviene de los enlaces ricos en energía del adenosintrifosfato (ATP), que se desintegra en adenosindifosfato (ADP) para proporcionar la energía requerida.

Tipos de contracciones musculares

1) Contracciones isotónicas. La palabra isotónicas significa “igual tensión”. Se define como contracciones isotónicas, desde el punto de vista fisiológico, a aquellas contracciones en las que las fibras musculares además de contraerse, modifican su longitud. Las contracciones isotónicas son las más comunes en la mayoría de los deportes, actividades físicas y actividades correspondientes a la vida diaria, ya que en la mayoría de las tensiones musculares que se ejercen suelen ir acompañadas por acortamiento y alargamiento de las fibras musculares de un músculo determinado.

2) Contracciones isométricas. La palabra isométrica significa igual medida o igual longitud. En este caso el músculo permanece estático, sin acortarse ni alargarse, pero aunque permanece estático genera tensión. Un ejemplo de la vida cotidiana sería cuando llevamos a un chico en brazos, los brazos no se mueven, mantienen al niño en la misma posición y generan tensión para que el niño no se caiga al piso. No se produce ni acortamiento ni alargamiento de las fibras musculares.

3) Contracciones auxotónicas. Este caso es cuando se combinan contracciones isotónicas con contracciones isométricas. Al iniciarse la contracción, se acentúa más la parte isotónica, mientras que al final de la contracción se acentúa más la isométrica.

4) Relajación (ausencia de contracción). La relajación es el momento en que la contracción da fin. Las diferentes fibras (miosina, actina) entran en su lugar y se encuentran con la aparición de la estría H. La relajación es el resultado del fin del impulso nervioso en la placa neuromuscular.

1.4. Entrenamiento de cualidades físicas para la mejora de la calidad del movimiento y el mantenimiento de la salud: flexo-elasticidad, fuerza y coordinación.

Un acondicionamiento físico adecuado consta de cuatro cualidades físicas: la flexibilidad, la elasticidad, la fuerza, la agilidad y la coordinación.

1) Flexibilidad. Capacidad que tienen las articulaciones de permitir un amplio rango de movimiento.
Algunos factores como el contorno de las superficies articulares, genéticamente determinado, así como la aparición de artritis puede limitar el movimiento articular. Por otra parte, hay que tener en cuenta que los jóvenes son más flexibles que los mayores y a su vez, las mujeres son más flexibles que los hombres.

2) Elasticidad. Propiedad que tienen músculos y tejidos de recuperar su longitud original, después de haberlos estirado. En el caso de los músculos, a mayor elasticidad, mayor capacidad contráctil.
Esta cualidad física está relacionada con la flexibilidad: una elasticidad pobre de los tejidos (músculos, cápsula articular, tendones, ligamentos, piel, etc.) que rodean una articulación, puede limitar seriamente su flexibilidad. Determinados factores como la edad y el sedentarismo, provocan mayor rigidez en los tejidos y por tanto, produce una limitación en el movimiento articular. Por el contrario, un aumento de la temperatura corporal en apenas un grado, incrementa la elasticidad y por tanto la flexibilidad.

Por ello, es muy importante realizar ejercicios de estiramiento, que sirven para:
-       Reducir la tensión muscular y relajar el cuerpo
-       Prevenir lesiones y evitar tirones musculares, contracturas, etc.
-       Favorecer la circulación sanguínea
-       Evitar la pérdida de movilidad
-       Mejorar la coordinación haciendo un movimiento más eficaz
-       Mejorar el conocimiento del cuerpo, etc.

Estos ejercicios se pueden realizar en cualquier momento;  antes, durante y/o después de nuestra actividad física. Los podemos desarrollar en forma sistemática y prolongada sin tener consecuencias posteriores. Se recomienda realizarlos en forma progresiva, es decir, de menor rango de movimiento a mayor rango de movimiento; y de forma ordenada, es decir, en el orden de las zonas del cuerpo que se van a utilizar durante la actividad física.

3) Fuerza. Cualidad motriz básica, que sirve de soporte a las demás cualidades físicas y que consiste en que un músculo genera una tensión determinada por acción de una contracción voluntaria. Existe un tipo de fuerza, la fuerza-resistencia, que permite realizar acciones prolongadas que requieran gran esfuerzo. Otro tipo de fuerza es la fuerza-potencia, que es rápida y permite realizar esfuerzos máximos en un espacio de tiempo corto.

4) Agilidad. Movilidad de un individuo en espacios reducidos, con grandes obstáculos y/o en condiciones de poca visibilidad, mucho ruido, etc.

5) Coordinación. Capacidad de los músculos de sincronizarse y ajustarse al medio que nos rodea. Los movimientos resultantes ocurren voluntariamente, por contracción coordinada de la musculatura necesaria. En esta capacidad están involucrados varios órganos y sistemas, como el oído, la vista, el sistema nervioso, etc.

1. 5. El sistema nervioso central como organizador de la respuesta motora.

Como ya sabrás de cursos previos, existen dos tipos de movimientos, los involuntarios y los voluntarios.

Movimiento involuntario

Muchos de nuestros movimientos se producen y coordinan a nivel de la médula espinal (o de otros centros del encéfalo) antes de llegar al cerebro y se les conoce como arcos reflejos

Algunos ejemplos son:

- Movimientos automáticos de evitación de daños (al acercar la mano al fuego, tras un corto espacio de tiempo la retiramos de forma refleja para no quemarnos).

- Movimientos de relajación de músculos antagonistas (como en el caso del bíceps y el tríceps braquial, que cuando uno se contrae, el otro se relaja y viceversa).

Movimiento voluntario

El acto voluntario se origina en cerebro, en concreto en el área motora primaria. Por una parte, esta área manda impulsos a músculos o grupos de músculos del lado opuesto del cuerpo. Por otra parte, las zonas de motilidad más precisa tienen más representación en el área motora primaria, especialmente representadas están las zonas de la mano y de la boca.

Ruta de los nervios involucrados en el movimiento

A continuación veremos en qué consiste la ruta nerviosa para el control del movimiento:

1) Las neuronas de la corteza motora primaria mandan sus axones a la base del cerebro y a la médula espinal.

2) En la base del cerebro, estas neuronas conectan con los ganglios motores de los nervios craneales.

3) Los axones que van hacia la médula espinal llegan al bulbo raquídeo y conectan con las neuronas motoras de la parte ventral de la médula, y forman la rama motora del nervio raquídeo.

4) Por último, otras neuronas establecen conexiones con otras partes del encéfalo, para que realizar la coordinación muscular.

1.6. Génesis del movimiento. Papel de los receptores sensitivos y órganos de los sentidos.

En el control muscular existen los siguientes elementos:   

1) Efectores. Como vimos en la unidad anterior, se trata de las neuronas motoras o motoneuronas. Cada una de estas neuronas contacta con una o varias fibras del mismo músculo, formando la unidad motora.

2) Receptores de presión. En este caso se trata de los tonorreceptores musculares, es decir, neuronas sensitivas que responden a la presión y que se localizan en los músculos y los tendones.

3) Receptores del equilibrio. Detectan nuestra posición respecto a la gravedad. Detectan aceleraciones lineales y aceleraciones tangenciales. Situados en el oído interno. Mandan información a la región temporal de la corteza cerebral a través del nervio auditivo.

4) Receptores de la vista. Detectan nuestra postura en las tres dimensiones del espacio y nos permite elaborar una respuesta ante un estímulo visual. Las células fotosensibles son los conos (visión en blanco y negro) y bastones (visión a color), se sitúan en la retina y envían la información a la región occipital de la corteza cerebral a través del nervio óptico.

Coordinación motora

Las neuronas motoras han de coordinarse para producir el movimiento adecuado o la postura correcta. En esta coordinación intervienen varias zonas del sistema nervioso, como la médula espinal, los núcleos motores del encéfalo, el cerebelo, la corteza motora cerebral, los órganos del equilibrio y de la vista, etc.
El cerebelo es uno de los órganos que más funciones tiene: recibe información motora, recibe información sensitiva de tensiones y posiciones de los músculos, recibe información de los órganos del equilibrio, controla las contracciones de movimientos precisos, Controla la postura corporal, Controla el equilibrio y movimientos oculares, Controla el aprendizaje motor. En definitiva, es el responsable último de las destrezas motoras.

Génesis del movimiento

El estímulo nervioso surge desde el núcleo motor del encéfalo y se traslada a través de las motoneuronas, hasta llegar a la placa motora y producir la contracción de las fibras musculares.
  
1.7. Calentamiento previo: su papel en la mejora del rendimiento y la prevención de lesiones. Adecuación a cada tipo de actividad artística.

Es de sobra conocida la importancia de un buen calentamiento previo a cualquier actividad de tipo motor, debido a que previene de lesiones musculares y articulares, además de mejorar el rendimiento físico y la consciencia de nuestro propio cuerpo para poder controlarlo mejor y conocer a fondo nuestras habilidades y limitaciones. Existe una gran variedad de ejercicios de calentamiento, por lo que los nombrados a continuación son tan sólo un ejemplo (Tomados de las técnicas de Jerzy Grotowski).

Ejercicios de calentamiento

-Caminar rítmicamente manteniendo los brazos en rotación.
-Correr de puntillas para obtener sensación de fluidez y falta de peso.
-Caminar con las manos en las caderas y las rodillas inclinadas.
-Caminar con las rodillas inclinadas, agarrándose los tobillos.
-Rodillas inclinadas, sosteniendo los dedos de los pies.
-Caminar con las manos extendidas al frente y las piernas rígidas, como si fueran de palo.
-Estirar y rotar los pies y los tobillos en todas direcciones.

Ejercicios para aflojar los músculos y la columna vertebral:

-Imitar a un gato que acaba de despertarse y se despereza.
-Tratar de liberarse de una barra de metal en el pecho.
-Pararse sobre las manos, apoyado en la pared. Luego, abrir las piernas, lo más que sea posible.
-Ponerse en cuclillas con la cabeza caída hacia delante y los brazos sueltos entre las piernas.
-Con los pies juntos, flexionarse hasta tocarse las rodillas con la cabeza.
-Rotación del tronco.
-Saltar con las piernas juntas.
- De rodillas, inclinar el cuerpo hacia atrás, hasta tocar el suelo con la cabeza.
-Brincar imitando los saltos de canguro.
-Caminar con los talones.

Ejercicios de la cara

-Mover rápidamente las cejas.
-Cara de enojo vivaz.
-Sonrisa vivaz.
-Inflar y desinflar los carrillos repetidas veces, etc.

Respiración

-Respirar sólo con el tórax.
-Respirar con el abdomen simplemente.
-Respiración total.
-Taparse alternadamente una narina y aspirar profundamente. Retener durante varios segundos y luego soltar el aire por la boca. Repetir estos ejercicios.

Ejercicios de calentamiento de la voz

El objetivo del calentamiento vocal es obtener un timbre vocal acústicamente atractivo, a través del uso de una enorme variedad de gimnasia vocal.
Los cantantes desarrollan regímenes distintivos apropiados para sus necesidades personales, estos pueden variar considerablemente con cambios en el aspecto físico, mental y emocional. Sin embargo, la consistencia en la metodología general es muy beneficiosa. Muchos cantantes comienzan calentando el cuerpo entero con varios ejercicios físicos (por ejemplo de elongación, etc.). Esto ayuda a aliviar la tensión muscular que interfiere con la producción vocal, así como estimular la respiración profunda la cual es necesaria para un buen soporte de la voz. Los músculos de articulación que incluyen la mandíbula, lengua, labios y el paladar suave, pueden relajarse con ejercicios apropiados, los cuales pueden ayudar para activar el fluido de aire del cantante (Consultar con tu maestro/a).
Antes de comenzar a explorar el potencial diario para resonancia vocal, el cantante debe estar relajado. Si el cantante esta fatigado o no se siente bien le será necesario energizarse para que pueda proveer un adecuado aporte de aire al cantar. Algunos ejemplos de ejercicios vocales:

1) Hay que tomarse de 5 a 10 minutos para hacer este proceso. Siempre hay que comenzar con unos cortos ejercicios de relajación para eliminar la tensión de cuello y hombros: respiraciones profundas, rotación de cuello y hombros, etc.

2) Con la ayuda de un piano, comenzar a hacer escalas de 5 tonos con la boca cerrada. Ejemplo: do, re, mi, fa, sol, fa, mi, re, do. Recuerda siempre partir de tu voz hablada o registro cómodo.

3) Luego hay que incorporar vocales a este mismo ejercicio, pero siempre en nuestro registro cómodo. Eliminar toda tentación de hacer notas altas mientras la voz se vaya poniendo a tono.

4) Estaremos listos para cantar cuando la voz esté brillante y colocada en la cara. 

 Si conoces más ejercicios de calentamiento relacionados con tu arte escénica, deja tus comentarios, indicando el arte escénica, el nombre del ejercicio de calentamiento y la forma de realizarlo.


2.1. Biomecánica: mecánica newtoniana y su aplicación al aparato locomotor humano. La cinética y cinemática aplicadas al movimiento humano durante el ejercicio físico.

La biomecánica es una área de conocimiento interdisciplinaria que estudia los modelos, fenómenos y leyes que sean relevantes en el movimiento (incluyendo el estático) de los seres vivos. Es una disciplina científica que tiene por objeto el estudio de las estructuras de carácter mecánico que existen en los seres vivos, fundamentalmente del cuerpo humano. Esta área de conocimiento se apoya en diversas ciencias biomédicas, utilizando los conocimientos de la mecánica, la ingeniería, la anatomía, la fisiología y otras disciplinas, para estudiar el comportamiento del cuerpo humano y resolver los problemas derivados de las diversas condiciones a las que puede verse sometido.
A partir de las leyes del movimiento mecánico, se estudia el sistema músculo-esquelético humano como un sistema mecánico clásico. El objetivo es obtener el máximo rendimiento con el mínimo esfuerzo. Para ello hay que diseñar tareas de forma que al ejecutarlas no se sufra ningún daño físico o lesión. ¿Qué es una lesión? Es una alteración mecánica de los tejidos. Lo primero que se nota es una carga física en el músculo, luego sensación de no confort, a continuación  aparecen los síntomas de las lesiones, luego los daños y el dolor, hasta llegar a una inhabilitación o imposibilidad de realizar una actividad relacionada con el músculo dañado.

TEORÍA DEL SOBREESFUERZO

Un esfuerzo en una actividad donde se realiza un trabajo físico. Por tanto, un sobreesfuerzo es una actividad física donde es esfuerzo sobrepasa los límites de la tolerancia normal fisiológica y física.

TÉCNICAS DE ANÁLISIS BIOMECÁNICO

Existen diferentes técnicas para adquirir datos objetivos en estudios biomecánicos. Algunas de estas técnicas son las técnicas de estudio de cinemática articular y técnicas de estudio de fuerzas externas e internas.
La biomecánica ha tenido un gran desarrollo en relación con las aplicaciones de la ingeniería a la medicina, la bioquímica y el medio ambiente, tanto a través de modelos matemáticos para el conocimiento de los sistemas biológicos como en lo que respecta a la realización de partes u órganos del cuerpo humano y también en la utilización de nuevos métodos diagnósticos.
Una gran variedad de aplicaciones incorporadas a la práctica médica; desde la clásica pata de palo, a las sofisticadas ortopedias con mando mioeléctrico y de las válvulas cardíacas a los modernos marcapasos existe toda una tradición e implantación de prótesis.

La biomecánica se divide en dos partes:

1.    Dinámica: Estudio de las leyes que rigen el movimiento.

2.    Estática: Estudio de las leyes que rigen el equilibrio.

Dentro de la biomecánica dinámica se encuentran:

1.    Cinética: Estudio de las fuerzas que generan (modifican o detienen) el movimiento.

2.    Cinemática: Descripción geométrica del movimiento en términos de desplazamiento, velocidad y aceleración.

LAS LEYES DE NEWTON

Ley de Inercia

Un cuerpo en descanso permanecerá en descanso y un cuerpo  en movimiento continuará moviéndose a una velocidad constante y en la misma dirección a menos que actúe sobre  él mismo una fuerza externa.

Ley de Aceleración

La aceleración de un cuerpo es directamente proporcional a la fuerza que causa la aceleración y es  inversamente proporcional a la masa de ese cuerpo y en la  misma dirección de la fuerza.
Ecuación fundamental de la dinámica: F = m . a

El peso de un objeto no es la masa del mismo sino el efecto de la aceleración por la gravedad en una masa. Por lo tanto, el peso es una fuerza.

Ley de Acción-Reacción

Para cada acción siempre hay una reacción igual y opuesta.

LAS FUERZAS

Se entiende como fuerza a cualquier acción o influencia que es capaz de modificar el estado de movimiento o de reposo de un cuerpo, es decir, de imprimirle una aceleración a ese cuerpo.

Magnitudes

        Escalar. Tienen magnitud pero no tienen dirección.

     Vectores.  Tienen magnitud, dirección y punto de aplicación. Los vectores se visualizan gráficamente por medio de:
  • Una línea de acción: La línea de acción se dibuja en una escala arbitraria para representar la magnitud de la fuerza. Se llama dirección.
  • Con una flecha que nos indica el sentido de esa  fuerza.
  • Con un punto de aplicación que representa la aplicación de una fuerza en un cuerpo.
SISTEMAS DE FUERZAS

Cuando varias fuerzas actúan sobre puntos invariablemente unidos, forman lo que se llama un sistema de fuerzas. Cuando un sistema de fuerzas puede sustituirse por una sola fuerza capaz de realizar el mismo efecto, esta fuerza se denomina resultante (R). 
 Cuando unas fuerzas actúan en la misma línea o en líneas paralelas podemos sumar las fuerzas para encontrar la fuerza resultante. Esta es la fuerza que produce el mismo efecto de todas las fuerzas actuando a la misma vez en un cuerpo. La magnitud de esa fuerza resultante la podemos encontrar de forma gráfica dibujando vectores de fuerza a escala o de forma algebraica usando la fórmula de la fuerza resultante es igual a la suma de las fuerzas individuales.
Si las fuerzas actúan en dirección opuesta, las fuerzas se restan.
Si dos fuerzas actúan en ángulo, la fuerza resultante no es la suma de las fuerzas. Resolvemos la situación gráficamente construyendo un paralelogramo. La resultante es la diagonal del paralelogramo.
Si el ángulo entre las fuerzas aumenta, la fuerza resultante disminuye.
Si el ángulo entre las fuerzas disminuye, la fuerza resultante aumenta.

MOMENTO DE UNA FUERZA

El momento de una fuerza es el producto de la fuerza aplicada por la distancia entre el punto de aplicación y el punto de rotación del cuerpo. En una palanca, la distancia entre el fulcro (o eje) y el punto de aplicación de una fuerza se denomina "brazo de palanca". Así pues, el principio de la palanca afirma que una fuerza pequeña puede estar en equilibrio con una fuerza grande si la proporción entre los brazos de palanca de ambas fuerzas es la adecuada.
En la palanca se consideran dos fuerzas: una carga o resistencia, que suele ser el peso de un objeto que se desea mover; y una potencia, que es la fuerza que se ejerce para causar el movimiento. Este principio de la palanca se puede expresar como una sencilla ecuación:
 FpBp = FrB
Donde Fp y Fr son las fuerzas de potencia y resistencia, respectivamente; y Bp y Br sus respectivos brazos de palanca.

LAS CADENAS CINÉTICAS

Una cadena cinética es la utilización coordinada de diferentes palancas con un objetivo comén de movimiento. Existen dos tipos de cadena cinética:
Abierta: Se caracteriza porque el último segmento está libre o tiene poco peso u no está en contacto con ninguna superfície. El último segmento hace función de “látigo”. Ejemplo: Todos los lanzamientos o golpeos.
Cerrada: Se caracteriza porque el último segmento está en contacto con el suelo y/o levanta una carga muy elevada. Ejemplo: Ejercicio de sentadilla.

CENTRO DE GRAVEDAD

El centro de gravedad es el centro de simetría de masa, donde coinciden los planos sagital, frontal y horizontal. En dicho punto, se aplica la resultante de todas las fuerzas de gravedad que actúan sobre un cuerpo.
En posición anatómica de pie el centro de gravedad se encuentra un poco anterior a la segunda vértebra sacral.
Localización del centro de gravedad en relación a la base de sustentación: Para que exista estabilidad y en consecuencia, equilibrio, el centro de gravedad de un cuerpo debe proyectarse dentro de la base de sustentación.
El grado de estabilidad o movilidad de un cuerpo en términos  mecánicos va a depender de:
-El tamaño de la base de sustentación.
-La altura del centro de gravedad sobre la base de sustentación.
-La localización de la línea de gravedad dentro de la base de sustentación.
-El peso del cuerpo.

Equilibrio Estable
Alteramos la posición del centro de gravedad levemente y el cuerpo puede hacer los ajustes necesarios para lograr que el centro de gravedad regrese a su posición original.
Equilibrio no Estable
Alteramos la posición del centro de gravedad y el cuerpo no puede regresar a su posición original y asume una posición nueva.

Equilibrio Neutral
Cuando el centro de gravedad se desplaza pero permanece a un mismo nivel (el cuerpo ni se cae, ni regresa a la posición original, sino que se desplaza el centro de gravedad con su base de sustentación.

2.2. Sistemas de estudio empleados en biomecánica. Aplicación a la mejora del rendimiento y bienestar físico.

La biomecánica es una ciencia relativamente nueva; describe los procesos involucrados en los movimientos de los seres vivos. Tales movimientos dependen de la aplicación de las fuerzas, invisibles para el ojo humano, por ello ortopedistas, atletas, entrenadores, fabricantes de zapatos, ergonomistas, neurólogos y otros muchos especialistas, confían en los datos suministrados por las plataformas de fuerza Kistler. El equipo les proporciona una información exacta sobre la magnitud y el comportamiento de las fuerzas que actúan sobre el cuerpo, o bien para mejorar el rendimiento o para un diagnóstico médico.

2.3. La posición anatómica y de los planos de simetría. Lesiones derivadas del desarrollo de las artes escénicas. Su prevención.

Para hablar de posiciones anatómicas, la persona ha de estar en posición erguida, de pie y con los dos pies juntos, la cabeza alzada mirando hacia el frente, con los brazos a lo largo del tronco y las palmas de las manos hacia delante. En esta posición, podemos diferenciar varias direcciones anatómicas:
-Craneal (que está más cerca de la cabeza)
-Caudal (que está más cerca de los pies)
-Ventral (que está cerca de las caras anteriores del cuerpo)
-Dorsal (que está más cerca de la cara posterior del cuerpo)
-Medial (que está hacia la línea media del cuerpo)
-Lateral (que está más alejado de la línea media del cuerpo)
-Proximal (que está más cerca del eje principal del cuerpo)
-Distal (que está más alejado del eje principal del cuerpo)




PLANOS DE SIMETRÍA

Existen 3 ejes corporales o planos de simetría:
1) Plano coronal. Es un plano longitudinal que pasa por el centro del cuerpo y lo divide en anterior o ventral y posterior o dorsal.
2) Plano sagital. Es un plano longitudinal que divide el cuerpo en dos mitades simétricas: derecha e izquierda.
3) Plano transversal. Es un plano horizontal que divide el cuerpo en dos mitades no simétricas: una superior o coronal y otra inferior o caudal.





POSICIONES ANATÓMICAS

Nombraremos 5 posiciones. La primera ya la hemos comentado y es la posición erguida, que nos sirve para localizar las direcciones y los planos de simetría. Las otras 4 son:
-Decúbito supino. La persona se encuentra acostada sobre su espalda, con los brazos estirados a los lados del cuerpo, las piernas extendidas, paralelas y alineadas con la columna y la espalda; y los pies formando un ángulo recto con respecto al resto del cuerpo.
-Decúbito prono. La persona se encuentra acostada sobre su abdomen, con la cabeza girada hacia uno de los lados y los brazos flexionados a ambos lados de la cabeza o extendidos a lo largo del cuerpo.
-Decúbito lateral izquierdo. La persona se encuentra tumbada sobre su costado izquierdo en un plano paralelo al suelo, con la cabeza y el tronco bien alineados, con el brazo izquierdo flexionado en ángulo recto y apoyado sobre la almohada, el brazo derecho bien extendido a lo largo del cuerpo, pierna izquierda extendida o ligeramente flexionada y pierna derecha flexionada con la rodilla en ángulo recto.
-Decúbito lateral derecho. Lo mismo que el caso anterior, pero a la inversa.

LESIONES ÓSEAS

Las lesiones óseas afectan a los huesos y se producen por un choque violento, un golpe o por osteoporosis. Existen dos tipos:
1) Las fisuras: grietas que se producen en los huesos sin que éstos lleguen a romperse.
 
2) Fracturas: rotura total del hueso. La fractura puede ser interna, si el hueso roto no rompe la piel y queda en el interior del cuerpo, o externa, que provoca el desgarro de la piel y el hueso queda al descubierto.

LESIONES MUSCULARES

Se distinguen tres tipos:
1) Contusión: se produce debido a un golpe. Es una lesión leve que produce dolor al estirarse el músculo.
2) Desgarro: los deportistas lo llaman tirón muscular. Consiste en una rotura de varias fibras musculares (miofibrillas). Esto origina un intenso dolor que provoca dificultades en el movimiento. Este tipo de lesión es debido a un golpe o aparece cuando el músculo realiza un sobreesfuerzo.
3) Rotura: consiste en la rotura de varios paquetes musculares. Provoca dolor intenso, hinchazón y, en ocasiones, hematomas, lo que impide el movimiento. Puede ser producido por un accidente, un sobreesfuerzo o una mala coordinación muscular. La recuperación no es total, porque las fibras musculares han perdido la capacidad de regenerarse. En la zona donde han desaparecido las fibras musculares dañadas se produce un relleno de fibras colágenas sintetizadas a partir de células del  tejido conjuntivo. Este hecho hace que esa zona no pueda contraerse y pierda elasticidad.

LESIONES EN LAS ARTICULACIONES

Este tipo de lesión se denomina esguince, que suele afectar al tobillo o la muñeca. Se produce por una torcedura de la articulación, provocada por apoyar mal la estructura que se lesiona. Esta lesión produce dolor intenso, hinchazón en la zona e imposibilita el movimiento de la articulación. La lesión es leve y la recuperación suele ser rápida, aunque no suele ser total, por lo que puede repetirse la misma lesión en la zona al cabo de un tiempo.

2.4. Postura corporal correcta e incorrecta. La postura como fuente de salud o enfermedad: la repetición gestual y los errores posturales en las diferentes manifestaciones artísticas como origen de lesión.

Las lesiones pueden subsanarse, en parte, si se ejercita el Aparato Locomotor. Los músculos que lo conforman se atrofian por falta de trabajo, pero si los hacemos trabajar se desarrollan más. Lesiones musculares, como las contracturas o el tirón, y las lesiones en los ligamentos pueden evitarse si el músculo ha trabajado de forma progresiva gracias a un buen calentamiento.

Posturas

El cuerpo, incluso relajado puede mantener una determinada posición gracias al tono muscular. El tono muscular es una contracción prolongada y débil de los músculos, que permiten mantener la postura. Generalmente adoptamos malas posturas en nuestra actividad diaria. Si éstas son prolongadas o se repiten mucho pueden provocar deformaciones permanentes en los huesos. La parte más sensible a estas deformaciones es la columna vertebral. Las malas posturas se adquieren durante la edad infantil y es muy difícil reeducar al organismo. Los niños y los adolescentes pasan muchas horas sentados. Es importante aprender a sentarse bien para que no aparezca en el futuro un dolor de espalda. También es necesario utilizar un mobiliario que se ajuste a nuestras características físicas. Por ejemplo, un chico con una altura de 1,80m no puede utilizar una mesa que tenga una altura de 60cm, ya que tendría las piernas demasiado flexionadas y la espalda muy curvada. Este mobiliario utilizado de forma continuada provocaría una postura que con el tiempo generaría una contractura muscular en la espalda. Un niño de 6 años, con una altura de 1,10m no debería utilizar sillas con una altura superior a 50cm, ya que los pies no le llegarían al suelo y, al no tener apoyo, le generaría un gran cansancio. Tanto el dolor como el cansancio influyen en nuestras relaciones, en la atención que prestamos, en el estado de ánimo y, por tanto, en nuestra salud.

Las malas posturas

Las malas posturas pueden ser generadas también por elementos que nosotros elegimos. Como ejemplos, vamos a destacar dos:

1. Las mochilas. En ocasiones, para ir a clase hay que cargar con gran cantidad de libros y otros materiales. Si se utilizan carteras o mochilas que hay que llevar a la espalda debemos pensar que ese peso adicional provoca que nuestra espalda adquiera una curva incorrecta, que es una mala postura que, con el tiempo producirá dolor.

2. Los zapatos. Al elegir un zapato, observamos el color, la forma, el tacón, el precio, los accesorios, y si está de moda o no, pero no pensamos si está diseñado para favorecer el movimiento del pie. El pie debe mantener el equilibrio, el peso del cuerpo, la estabilidad y producir la movilidad. Si se utiliza un calzado inadecuado aparecerá el dolor. Éste impedirá realizar las funciones del pie correctamente, creará problemas, como callos y juanetes. En los casos más graves, puede afectar a los tobillos, las rodillas y la columna vertebral.